El Espíritu del Señor DIOS está sobre mí, Porque me ha ungido el SEñOR Para traer buenas nuevas a los afligidos. Me ha enviado para vendar a los quebrantados de corazón, Para proclamar libertad a los cautivos Y liberación a los prisioneros; Para proclamar el año favorable del SEñOR, Y el día de venganza de nuestro Dios; Para consolar a todos los que lloran, Para conceder que a los que lloran en Sion Se les dé diadema en vez de ceniza, Aceite de alegría en vez de luto, Manto de alabanza en vez de espíritu abatido; Para que sean llamados robles de justicia, Plantío del SEñOR, para que El sea glorificado. Isaias 61:1-3

jueves, 15 de noviembre de 2007

Virginia


La palabra del Señor dice en el Evangelio de Juan: "...el que es nacido del espiritu es como el viento, que oyes su sonido, pero que no ves, ni sabes de donde viene o a donde va". Y esta palabra fortalece mi corazon que humano y debil quiere ver para poder creer.

Sin embargo precioso es nuestro Dios cuando podemos comprender que El es Dios de fe. Hace donde no hay, y hace por su palabra. Esa palabra que tu y yo hoy recibimos y asumimos en un acto violento de fe, que aunque no veamos, ni sepamos muchas cosas referente a nuestro mañana nos fortalece y nos da vida a confiar plenamente en El. Dios lo dice, yo lo creo. Y hoy soy lo que Dios dice que yo soy.

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